¿Cómo preparar a mi gato para el divorcio?

Las primeras víctimas de un divorcio son los niños. Pierden la oportunidad de crecer con sus padres en el mismo entorno. Las mascotas, sobre todo perros y gatos, también se ven muy afectadas por la separación de sus dueños. Para ayudarles a sobrellevar mejor esta situación, hay que adoptar una serie de actitudes. La página web Hola Mascotas, especializada en información sobre animales de compañía, te ofrece algunos consejos para preparar a tu gato ante un divorcio.

¿Son sensibles los gatos al divorcio de sus dueños?

Los gatos son animales muy sensibles y suelen estar muy apegados a sus dueños. Prestan especial atención al amor que les demuestran sus amos y pueden sentir su alegría. Se desarrollan mejor en un entorno cariñoso y atento. Al igual que los niños, los gatos también se ven afectados por la separación de sus dueños. Sienten emociones negativas y se entristecen cuando las cosas van mal a su alrededor. Algunos gatos pueden negarse repentinamente a comer y otros desarrollan comportamientos extraños.

Mientras que los niños son capaces de comprender la situación y adaptarse rápidamente, no siempre ocurre lo mismo con estos pequeños felinos. Durante este periodo, debes mostrar mucho cariño a tu gato. Pasa más tiempo con él para tranquilizarlo y, sobre todo, dale muchos mimos. Estos pequeños gestos le ayudarán a tranquilizarse.

El verdadero problema reside en gestionar sus cuidados. Como todos los niños, tendrá que quedarse con uno de la pareja. ¿Qué solución será la mejor para su bienestar?

Divorcio: facilitar la transición a tu gato

Antes de que se firmen los papeles del divorcio, o antes de la separación propiamente dicha, es aconsejable tomar una decisión sobre la gestión del gato. Durante este delicado periodo, es importante tomar medidas para garantizar que tu mascota pueda seguir prosperando. Por ejemplo, a pesar de posibles desacuerdos, los miembros de la pareja pueden acordar turnarse para cuidar del gato.

El miembro de la pareja al que se confíe la custodia debe comprometerse a contribuir al bienestar del animal durante el procedimiento. Durante este periodo, el gato puede mostrar su disgusto de diversas maneras. Evita castigarlo o regañarlo si se muestra desobediente. En su lugar, presta atención a sus reacciones y no dudes en permitirle pasar tiempo con el otro compañero. Lo ideal es una separación suave para la felicidad de todas las partes.

Tras el divorcio, el comportamiento de tu gato puede cambiar por completo. Se trata de una reacción totalmente natural. Tendrás que ser paciente para ayudarle a gestionar este periodo de transición. Recuerda que tu mascota es sensible y puede echar de menos a tu ex pareja. Así que no dudes en compensar este sentimiento ofreciéndole mucho afecto.

Dejar al gato en el hogar familiar tras el divorcio

A diferencia de los perros, los gatos están muy apegados a su entorno, a veces más que a sus dueños. Están muy apegados a su territorio, y les resultará muy difícil abandonarlo. Para ayudar a tu gato a sobrellevar mejor el divorcio, te recomendamos que cedas su custodia al miembro de la pareja que se quede con la casa, si ésta no se ha vendido.

A pesar de la tristeza provocada por la marcha del otro cónyuge, podrá consolarse en un territorio con el que se identifica. Para saber más sobre las preferencias y necesidades de un gato, visita nuestra página de información Hola Mascotas.

gato debajo de una manta
Si estás de viaje de negocios, lo mejor es dejar la mascota con tu ex cónyuge.

Evita la custodia compartida de tu gato tras un divorcio

En caso de divorcio, puede resultar tentador encontrar una solución amistosa que permita a todas las partes mantener un vínculo con la mascota. Si bien la custodia compartida es una opción que ayuda a mantener el equilibrio entre los hijos, no es el caso del gato. Se desorientará al ser trasladado de un entorno a otro, y perderá toda su alegría habitual. Este tipo de estilo de vida es absolutamente desaconsejable para este tipo de animal, que encuentra sus raíces en el entorno que considera suyo.

Para contribuir al bienestar de tu gato, debes saber qué hacer para que este pequeño felino sea feliz. Hola Mascotas, especializada en el ámbito de los animales de compañía, pone a tu disposición toda su experiencia para ayudarte a reforzar el vínculo con tu gato. Si estás pasando por un divorcio con tu pareja, nuestros conocimientos te ayudarán a tomar la decisión correcta para tu mejor amigo.

Confía el gato al compañero al que esté más apegado

Aunque los gatos no pueden hablar, expresan sus emociones a través de sus acciones. Por eso tenderá a pasar más tiempo con uno de sus amos, frotándose contra él o lamiéndole la piel. Es una forma de expresar su apego. Prestando atención a las actitudes de tu mascota, podrás saber fácilmente cuál le gusta más.

A pesar de tu amor por él, lo ideal es dejarle vivir con el otro compañero si prefiere su compañía. Así se sentirá más realizado, y tú también estarás seguro de que se le quiere como es debido. Tras años de convivencia con tu pareja, normalmente sabrás si es capaz de cuidar a tu gato como es debido. Si el bienestar del animal se ve comprometido con él, no dudes en pedirle que se haga cargo de su custodia. Lo ideal, sin embargo, es evitar en lo posible posibles conflictos.

Dar la custodia del gato a la pareja que lo adoptó

Si fuiste tú quien adoptó al animal antes de casarte, es probable que esté más apegado a ti que a tu pareja. Es probable que tu gato te vea como su amo principal, y como tal te será muy fiel. Por su bienestar, deberías conservar su custodia tras el divorcio.

Sin embargo, los gatos no tienen el mismo grado de lealtad que los perros. Aunque seas su amo, puede estar mucho más apegado a tu cónyuge que a ti por muchas razones. Todo depende de quién les trate como ellos quieren ser tratados. Por eso, aunque tengas los documentos que demuestren que el animal te pertenece, no dudes en hacer la mejor elección para él.

Divorcio: el más rico se queda con la custodia del gato

Cuidar de un gato requiere recursos financieros considerables. Entre la alimentación, los cuidados sanitarios y otras necesidades, los gastos que conlleva el cuidado de este pequeño felino pueden llegar a ser muy elevados. Para garantizar el bienestar del gato, es aconsejable que los miembros de la pareja acuerden confiar su cuidado a quien pueda permitírselo.

El que disponga de menos recursos puede hacerse cargo de la custodia del animal y recibir una pensión para su manutención. En caso de separación conflictiva en la que ambos miembros de la pareja reclaman la custodia del gato, suele ser difícil llegar a un acuerdo de este tipo.

Divorcio: custodia del gato al cónyuge disponible

Los gatos son animales que necesitan constantemente atención y mimos. Se ponen tristes cuando sus dueños no están, y pueden tener dificultades para sobrellevar una separación larga. Tras la ruptura del hogar en el que vivía, necesita más cuidados de la pareja que ha asumido su custodia. Si estás de viaje de negocios todo el tiempo, lo mejor es que confíes tu mascota a tu ex cónyuge. Podrá dedicarle más tiempo.

A pesar de todo el amor que sientes por tu mascota, tus repetidas ausencias no ayudarán a que prospere. Lo único que estarás haciendo es aumentar su estrés, lo que podría tener consecuencias aún más graves para su bienestar. Así que no intentes forzar la custodia si sólo estás disponible unos días al mes.